Es una de las ciudades griegas más antiguas e importantes de Asia Menor, la primera de Jonia. Fue un importante y rico centro comercial y, desde el 129 aC, fue la capital de la provincia romana de Asia. El sitio arqueológico de Efeso Patrimonio de la Humanidad desde 2015 y actualmente el sitio arqueológico con más visitas de Turquía, las ruinas de Éfeso permiten imaginar cómo era la vida cotidiana en la era romana. Fue uno de los puertos más activos del Mar Egeo , ubicado cerca de la desembocadura del gran río Caístro.
Este lugar tiene más de 27 lugares interesantes para visitar y dos entradas separadas por 3 km de distancia. De ellas, se destacan algunas zonas que no pueden saltarse.
Cuenta la leyenda que en el siglo X a.C., a solo 3 km de las ruinas actuales, Androclo, el hijo del último rey de Atenas, fundó la colonia de Éfeso. Lo hizo en el lugar predicho por un oráculo de Apolo. La pitonisa le había indicado que un pez y un jabalí le mostrarían el lugar de la nueva ciudad.
Una noche, cuando sus hombres freían un pescado, este dio un salto y arrastró un tizón encendido que prendió fuego a un zarzal. De esta mata ardiente emergió un jabalí. Androclo y el príncipe lo mataron e interpretaron dicha situación como aquella predicción de la pitia, por lo que se decidió fundar la ciudad allí.
Sin embargo, fue en el siglo V a.C. que Efeso vivió un período de esplendor. Se destacó por permitir la integración de los extranjeros y dar gran importancia a la educación y a la cultura. Dió lugar a figuras de suma importancia como el poeta Calino, el pintor Parrasio y el gran filósofo Heráclito. También surgieron mujeres artistas, algo inusual en la Antigüedad clásica.
Una vez bajo el dominio de Roma, Éfeso fue escenario de algunos sucesos dramáticos, como el asesinato de Arsinoe IV, ordenado por Marco Antonio e instigado por Cleopatra. Con el reinado de Augusto, el primer emperador de Roma decidió que Efeso se convirtiera en la capital de la provincia de Asia, lo cual trajo una gran época de prosperidad a la ciudad. En su apogeo, hacia 100-150 d.C. Se cree que Efeso debía tener unos 500.000 habitantes, es decir, fue la segunda ciudad del Imperio después de Roma a nivel poblacional.
* Gran teatro: es una de las ruinas más asombrosas de Efeso. Allí se realizaban diferentes eventos como obras de teatro, conciertos, lucha de gladiadores, lugar de reuniones políticas o religiosas. Tenía una capacidad para 25.000 personas.
* Puerta de Hércules: se trata de dos enormes pilares en la Avenida de los Curetes decorados con figuras que representan a Hércules envuelto en la piel del león. En su momento, los pilares indicaban el final del camino de los vehículos para dar comienzo a la zona peatonal.
* Fuente de Trajano: construida en honor al emperador romano Trajano, quien fue proclamado en vida como Optimus Princeps (el mejor de los primeros ciudadanos) y su categoría fue elevada a “dios” por el emperador Adriano.
* Templo de Adriano: construido hacia el año 130 en honor al emperador y, lamentablemente solo ha quedado la fachada del pórtico. Se pueden ver las columnas y el arco, que tiene un relieve de Tyche, la diosa de la fortuna y en la luneta hay otro relieve de una mujer semidesnuda en hojas de acanto, que probablemente sea Medusa. Su estilo es jónico.
* Biblioteca de Celso: un espléndido edificio orientado al sol naciente y una de las bibliotecas más grandes del mundo que se creó en el año 114 y llegó a contener unos 12.000 manuscritos. Se construyó usando distintos trucos ópticos para que pareciera más grande.
* Basílica de San Juan de Éfeso: es una de las principales iglesias de la ciudad tardorromana y bizantina de Éfeso, construida sobre la tumba atribuida al evangelista Juan en la colina de Ayasoluk en las afueras del norte de la ciudad.
* Templo de Artemisa: se trata de una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo. Lo más interesante de este sitio es imaginar cómo funcionaba realmente la ciudad a partir de los restos que pueden visualizarse. También es posible notar una distinción de clases sociales en cuanto al uso de los edificios.
* Casa de la Virgen María: es un santuario católico y musulmán en la colina cerca de Éfeso, a siete kilómetros de Selçuk (ahora en Turquía ). La Iglesia ortodoxa siriana dice que María fue llevada a este lugar por Juan el Evangelista después de la crucifixión de Cristo, huyendo de la persecución en Jerusalén. Juan le hizo construir una pequeña casa donde permaneció hasta su asunción.
Acarlar, 35920 Selçuk/Provincia de Esmirna, Turquía.
De abril a octubre, abierto de 8:00 a 20:00. De noviembre a marzo, abierto de 8:30 a 17:30
Las ruinas de Éfeso se ubican a 45 minutos en automóvil desde el aeropuerto de Izmir. La aerolínea Atlas Jet tiene un servicio de transporte para pasajeros hasta la ciudad de Selcuk sin ningún costo. También se puede acceder en autobús desde la ciudad de Estambul.